Decía Einstein: " ¿Cuántas personas están atrapadas en sus hábitos cotidianos, cuántas están algo perplejas, algo asustadas y algo indiferentes?. Para tener una vida mejor tenemos que estar eligiendo siempre cómo vivir".
Cierto es que como seres humanos que somos, todos necesitamos en cada momento de nuestra vida, elegir continuamente nuestros mejores pensamientos y nuestras mejores acciones. De esto depende en gran medida la clase de vida que nos creamos.
Todos tenemos la posibilidad de ser grandes, tú eliges como vivir, las limitaciones a tu grandeza sólo dependen de ti. No es tu aptitud, sino tu actitud, lo que determina tu altitud. Y todos tenemos la libertad de escoger nuestra actitud.
Necesitamos elegir continuamente cómo vivimos cada momento. Debemos preguntarnos, lo que estoy haciendo en este momento, ¿es el mejor modo de usar mi tiempo y mis talentos?, ¿lo que estoy haciendo hoy me acerca al lugar dónde quiero estar mañana?. La respuesta es sencilla, si no es así debemos de cambiar. Sí, debemos de cambiar, pero ¿qué cambiar?, ¿a qué cambiar?, ¿cómo cambiar?. Las respuestas están dentro de ti.
Decía Galileo Galilei: " Yo no puede enseñar nada a nadie, sólo puedo ayudarle a encontrar el mejor yo que lleva dentro". Las respuestas están en las preguntas. Lo que eres ahora, es la suma de todas las elecciones que has hecho desde que naciste hasta hoy. Tú destino se determina según tus elecciones. Debes de asumir tu responsabilidad. Las opciones que han determinado tu vida actual, tienen mucho que ver con tus pensamientos habituales, con la gente con la que te has rodeado, con los libros que has leído y las acciones que has emprendido. Sólo tú eres el responsable de la vida que tienes delante de ti.
Rudyard Kipling escribió: " Tenemos cuarenta millones de razones para el fracaso, pero ninguna excusa".
Tú eres la causa de todo en tu vida. Si no aceptas ninguna responsabilidad en tu vida y culpas a los demás, estás entregando el poder de la misma a esas personas. Acepta tu responsabilidad, debes de ser auténtico. Las circunstancias no definen a una persona, pero sí la revelan.
V.H.Burrous decía: "Una de las experiencias más tristes que le pueden ocurrir a un ser humano es despertar, con el pelo encanecido y la piel arrugada, próximo al final de una carrera improductiva, y descubrir que en el curso de los años sólo ha utilizado una parte pequeña de sí mismo".
Actúa, ¿Cuándo?. Ahora.
Eleva tus valores, cambia tus hábitos, cambia tu vida y comprometete a llegar al final. Baltasar Gracián decía : " El sabio hace de inmediato lo que el tonto posterga indefinidamente". La postergación es el suicidio cotidiano. Es tan fácil caer en la trampa de una vida mediocre. Lucha por tus sueños, si no estarás luchando por los sueños de otros. Si no te haces cargo de tu vida y actuás, la vida actúa por ti. Necesitas ser el capitán de tu barco, el dueño de tu destino y dirigirlo en la dirección correcta si deseas tener éxito. Mejora tus hábitos, mejora tus pensamientos, piensa en grande.
Aumenta tu zona de influencia, disminuye tu zona de preocupación y confort, se proáctivo, actúa con un fin en mente. Siembra un pensamiento, cosecha una acción; siembra una acción, cosecha un hábito. Siembra un hábito, cosecha un carácter, siembra un carácter, cosecha un destino.
" Somos lo que hacemos día a día. De modo que la excelencia no es un acto sino un hábito" Aristóteles.
Si queremos cambiar la situación, debémos cambiar nosotros mismo. Y para poder cambiar nosotros debemos cambiar nuestras percepciones.
Las acciones siempre tienen consecuencias. Haz buenas acciones para ti y los demás, se excelente, y todo lo bueno que deseas fluirá hacia ti. Trátate mal y cae en la trampa de los malos hábitos y pagarás el precio.
Cambia tus hábitos, cambia tu vida, elige como vivir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario